febrero, 2006

Quédate con lo que quieras. Tóma mi silla favorita, la vajilla, las sabanas; sobretodo las sábanas. Quédate con tus amigos, te regalo a los mios también. Haz lo que gustes, sé que lo harás. Pero no vuelvas, porque aquí no quiero que haya nada que me recuerde a ti. Desaparece con tu aróma y tu fórma infernal de bailar. Quédate con todo mi amor, siempre fué tuyo y creeme, no crece en los árboles. Quédate con mi hambre y déjame sólo las cuentas que hay que pagar, déjame un beso sin pasado ni futuro, sin fecha de caducidad. Congélalo. Pero vete que me estorbas. Que no te quiero ver mientras tenga ojos y conciencia. Vete y llevate toda la luz que me diste para sólo pretender que me querías. Llevate tus lamentaciones y las mentiras que están saliendo de mi boca.