viernes, 21 de diciembre de 2012

high and dry


Perdí toda habilidad para darme a entender.
Perdí toda habilidad para comer de su mano.
Le perdí su bufanda favorita y armé un alboroto durante la cena.
Le rompí la cara a alguien y cuando llegué a casa me regañé.
Perdí la compostura de algo que nunca se había descompuesto. 
No sé como hablan los demás. Pero no es como en las películas, estoy seguro.
Estaría seguro de que 15 minutos antes de la escena final volverías, hermosa y desalineada.

Entonces…

Me quedo quieto mirando cómo la felicidad se expande por todo tu cuerpo, volviéndote algo maravilloso y horrible. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario